El mes pasado el Parlamento europeo aprobó la denominada “directiva de retorno de los sin papeles”, según la cual los inmigrantes ilegales podrán pasar 18 meses retenidos hasta que se tramite su expulsión. Las voces de alarma (como es obvio) no se han hecho esperar.
Desde mi punto de vista, la Unión Europea ha hecho un paso hacia atrás, puesto que esta medida no recoge algunos de los derechos fundamentales. ¿Cómo se entiende que se incluya la posibilidad de enviar a los menores no acompañados a países donde no tengan un tutor o familia? ¿Es esta la Europa que queremos construir?
Por suerte, no todos los países del mundo aplican políticas similares. Si pasamos nuestras fronteras y cruzamos el charco, vemos que existe otra realidad: en Toronto tienen claro eso de que “en la pureza está la mezcla”, ya que la mitad de los habitantes de la ciudad no han nacido allí. El alcalde David Miller se muestra optimista: algún día “el mundo será como Toronto”.
Esperemos que sí.
4 comentarios:
Cómo te gusta Jarabe de palo! En lo puro no hay futuro, no!
Wapiximaaa! Ets una crack. Ara no tinc gaire temps per llegir-te els posts aixi com tampoc en tinc per escriure'n. Si tot va be la setmana que ve tindre internet al piset de New YorK City... espero!! Un peto molt i molt gran reina!
Tema complicat el de la immigració, no m'he llegit en detall la nova llei europea, però l'exemple que comentes sí que no em sembla humà. Sobre el mestisatge, sí, està bé però regulat. En fi, que demà marxo a Alemanya a les 6 i no tinc temps per explaiar-me, potser n'escric algun altre dia :)
Jordi, jo crec que tot s'ha de fer de manera equilibrada, però amb SENY! i hi ha certs aspectes que (em sembla) no es contemplen com s'hauria de fer...
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